Este 24 de octubre ha salido a la luz el nuevo disco de La Fuga, bajo el nombre de «Justo Después del Silencio«, el cual está compuesto por un total de 12 temas, de los cuales ya hemos ido conociendo algunos de ellos gracias a los adelantos de la banda.
Este nuevo disco viene acompañado de una gira (cuyas entradas ya están a la venta) y que pasará por diversas ciudades de la península, comenzando por la Sala Apolo de Barcelona el próximo 31 de octubre.
El LP está grabado en los Estudios Clip de Reinosa y producido por Nando G. Miguel. Con mezclas de Tomi Pérez y masterización de Alex Psadourakis en Nueva York.
El álbum, que recoge la esencia más pura y sincera de la banda cántabra referente ineludible del rock en castellano, incluye temas inéditos que hasta ahora no ha revelado la banda, que recorren encuentros y desencuentros, noches lúcidas y silencios profundos.
Desde la contagiosa energía de “Este Blues”, su primer single, hasta la sensibilidad de “Horas infinitas”, una balada que captura esas horas intensas e inolvidables de un encuentro fugaz, donde la pasión y la complicidad ganan al arrepentimiento, deseando alargar el instante que desafía el tiempo. También están la melancolía que “A ratos” retrata y la tristeza contenida de “Flores de mentira”, un viaje emocional por los restos de un amor que se apaga, donde la fragilidad y el silencio golpean con fuerza sin necesidad de levantar la voz.
El álbum también alberga momentos íntimos como “Por echarte de menos”, desnuda y cara a cara, donde cada nota y palabra van directas al corazón, y temas intensos como “Mil perdones” y “En mi pecho”, completando un paisaje musical vibrante y sincero.
Además, incluye cuatro singles previos a la grabación como bonus tracks: “Demasiado tarde”, “Luna”, “Cada vez duele menos” y “La Guarida”, himnos ya esenciales en la historia de la banda.
“Justo después del silencio” no es solo un disco, es un diario de momentos vividos, un homenaje sincero a lo cotidiano y a esas pequeñas grandes historias que construyen nuestro día a día. Un álbum en el que La Fuga se desnuda para conectar de forma directa y honesta con su público, reafirmando la complicidad que mantiene con quienes han hecho de su música una banda sonora inolvidable.
